El estilo de vida actual sumado a largas jornadas laborales condicionan a numerosas personas a tomar sus últimos alimentos después de las 10 de la noche. Si es tu caso, conocer más sobre los efectos negativos de comer en la noche podría ayudarte a mejorar tus hábitos y a sentirte mejor.

Hiromi Shinya, autor del libro La enzima prodigiosa, recomienda cenar de tres a cinco horas de acostarte. Si acostumbras dormir a las 24:00, entonces “deberías” tomar tus últimos alimentos alrededor de las 19:00 para no alterar el trabajo metabólico y digestivo.

5 efectos negativos de comer en la noche

1. Acidez estomacal. Acostarse después de cenar puede provocar que los ácidos del estómago suban al esófago y con ello, una sensación de ardor en la garganta o en el pecho. Esto sucede sobre todo con alimentos altamente grasosos, condimentados, picantes o ácidos. Al respecto, Timothy Morgenthaler, especialista del sueño de Mayo Clinic, sugiere abstenerse de este tipo de comidas en las noches.

2. Afecta el ciclo metabólico. Mientras duerme, es más difícil para el organismo metabolizar los alimentos. Esto favorece el aumento de peso y enfermedades como diabetes tipo 2, problemas gastrointestinales y hasta depresión, explica un artículo publicado en la revista TheScientist.

3. Levantarse para ir al baño. Cuando cenas tarde aumenta la necesidad de micción y excreción. Esto hará que despiertes en la madrugada para ir al baño. Recuerda que los alimentos se van a digerir durante sus horas de sueño. La recomendación es que si comes muy tarde opta por alimentos ricos en fibra ya que tu cuerpo tarda en procesarlos.

4. Mala calidad de sueño. Rosa Iselda Yáñez Neri, coordinadora de Nutrición y Dietética del IMSS de Jalisco, afirma que el tipo de alimentos que cenas y la hora en que los tomas influye directamente en la calidad de sueño.

Recomienda evitar grandes cantidades de carbohidratos, grasas, condimentos y azucares. Además de carne, refrescos chocolate y café porque alteran el ciclo del sueño. Opta por comidas ligeras como fruta, té y leche, así como alimentos calientes o tibios por su efecto relajante.

5. Enfermedades del corazón. Después de algunos años de investigaciones, Eric Rimm, profesor asociado de Medicina en Harvard Medical School de Harvard, explica que principalmente los hombres que cenan tarde aumentan hasta 55% las posibilidades de desarrollar una enfermedad cardiaca. Recomienda cuidar los hábitos alimentarios para reducir el riesgo de padecimientos coronarios, por ejemplo, reducir el consumo de alimentos altos en sodio.

Especialistas coinciden en que “no hay nada malo en comer en la noche” siempre y cuando sean alimentos ligeros, que complementen las calorías recomendadas diarias y hacerlo por lo menos, tres horas antes de dormir. ¿Acostumbras a hacerlo así?.