Una piel sana, suave y sin imperfecciones, es el sueño que muchas deseamos conseguir para nuestro rostro. En ocasiones nos gastamos altas cantidades de dinero en tratamientos de belleza que no siempre nos ofrecen el resultado esperado. No te preocupes, te damos sencillos y económicos remedios para nuestra piel que te encantarán.

Consejos para conseguir una piel saludable y hermosa

Como ya sabes, nuestra piel es también el reflejo de nuestra salud. Una piel sin rojeces, bien hidratada y con elasticidad es reflejo de una correcta alimentación donde no nos faltan las vitaminas y los minerales adecuados. Pero no siempre es fácil lograr esa piel deseada: el efecto del tiempo, del sol, del viento, esos cambios hormonales que o bien nos provocan pequeños accesos de acné, enturbian sin duda ese equilibrio que todas deseamos para lucir una piel bella y saludable.

Pero no te preocupes, en nuestro espacio deseamos darte remedios sencillos para ese día a día. Con ello no queremos decirte en absoluto que debas prescindir de tus cremas habituales, es solo un interesante modo de complementar tus tratamientos de modo sencillo y económico. Vamos allá.

1. Exfoliante de avena y bicarbonato

Indicado para hacerlo una vez a la semana, no más, solo una vez. ¿Y qué conseguimos con ello? Una piel luminosa, joven y sin impurezas. Logramos limpiar de células muertas nuestro cutis activando además su circulación. Es un remedio fácil libre de todo agente químico, un modo adecuado de tratar tu piel y de trabajarla para aflorar tu belleza natural.

¿Cómo lo preparamos? Muy fácil. Necesitas solo dos cucharadas de avena, una de bicarbonato de sodio y un poquito de agua. Lo mezclamos todo bien consiguiendo una especie de crema. Lo importante es que quede una pasta espesa que podamos aplicar en nuestra piel. Una vez aplicado, hazte unos masajes circulares para exfoliar y eliminar células muertas, durante al menos 15 minutos. Después, aclara con agua tibia. ¡Verás qué bien te va!

2. Tónico facial con té verde

Un remedio excelente para suavizar y activar nuestra piel. Muy adecuado para hacer por las mañanas o por las noches, limpiando así muy bien nuestra piel y favorecer nuestra circulación. No tenemos más que preparar una taza de té verde, con dos bolsitas. Una vez haya llegado a ebullición y reposado, ponlo un ratito en el refrigerador. Cuando esté frío cogemos un algodón y nos lo pasamos por toda la piel del rostro, notarás un alivio inmediato y la piel más tonificada.

3. Cómo eliminar rojeces

En ocasiones nos salen pequeñas manchitas, rojeces que aparecen con los cambios de estación, con el frío o por pequeños cambios hormonales. No pasa nada, podemos resolverlo con un sencillo remedio a base de miel y agua de romero. Estos elementos son maravillosos para reducir inflamaciones, para tratar, curar y regenerar. No tienes más que hacer una infusión con tres ramas de romero con medio vaso de agua. Deja que llegue a ebullición y añade tres cucharadas de miel. Cuando aún esté tibio -no caliente- aplícatelo con un algodón o una pequeña compresa en el rostro, dejando que actúe al menos durante 15 minutos. Después, enjuaga con agua y aplícate una crema hidratante. Te irá muy bien.

4. Tratamiento para los puntos negros

¿Quién no tiene alguna zona del rostro con puntos negros? En la nariz sobre todo, es algo normal y algo que siempre intentamos combatir desde bien jovencitas. Pues bien un modo ideal de eliminarlos poco a poco es mediante un sencillo tratamiento a base de yogur natural y limón. No no necesitas más que dos cucharadas de yogur natural y una de jugo de limón. Hacemos una mezcla bien homogénea y la aplicamos en esa zona más crítica. Deja actuar unos 20 minutos y después, aclara con abundante agua. Si lo haces cada día verás los resultados.

5. Eliminar y aliviar pequeñas cicatrices del rostro

En ocasiones, el acné nos deja esas clásicas señales que no se van con el tiempo.

Heridas que dejan cicatrices, imperfecciones de la piel que solemos disimular con maquillaje y que tanto nos molestan. ¿Como suavizarlas? ¿Qué hacer para que vayan despareciendo poco a poco? Un tratamiento ideal es el aceite de rosa de mosqueta. Puedes encontrarlo fácilmente en tiendas naturales e incluso perfumerías. No es muy caro y puedes encontrar tanto cremas, como el clásico aceite de rosa de mosqueta. No tienes más que ser constante y aplicarte con un algodón cada día ese tratamiento, efectuando un pequeño masaje para reactivar la circulación y consiguiendo así que el aceite llegue bien a la epidermis. Día a día y siendo constantes notarás como las cicatrices se van atenuando.

Recuerda que estos tratamientos serán efectivos si somos constantes y los usamos cada día. Muchas de nuestras cremas más caras suelen tener estos mismos principios naturales, así que todas podemos aprovecharnos de estos tributos naturales libres de agentes químicos que nuestros antepasados han utilizado desde la antigüedad.¡Ya nos contarás!.