El hígado es un órgano esencial en nuestro organismo. Es uno de los más grandes, y sus funciones, van desde la producción de proteínas, la metabolización de glucosa, hierro y colesterol, hasta ese campo esencial que es la desintoxicación de toda toxina o elemento extraño de nuestro organismo. Hemos de cuidarlo, pero en ocasiones nos ofrece síntomas de que algo no va bien… ¿quieres conocer los principales signos de un hígado intoxicado? Te lo enseñamos.

Síntomas de un hígado intoxicado

A excepción del cerebro, el hígado es el segundo órgano más complejo de nuestro cuerpo, de ahí la necesidad de mantenerlo siempre en buena forma y en buena salud, cuidando de esos pequeños aspectos que nos ayudan a mantenerlo sano.

No solo una buena alimentación es el pilar fundamental de su buen estado, nuestros hábitos de vida también perfilan su salubridad. Una vida activa, sana, donde se dejen de lado el tabaco, el sedentarismo, el alcohol o incluso el consumo de excesivos medicamentos, nos ayudará inmensamente a alejarnos de estas intoxicaciones que suelen enfermarlo.

1. Calambres estomacales e hinchazón

¿Te ha pasado alguna vez? Sentirte especialmente hinchado: manos, tobillos, pies, abdomen…en primer lugar decirte que no debes alarmarte si un día sientes que te ocurren estos síntomas, no pasa nada por presentarlos alguna vez de forma aislada. El problema llega cuando es algo recurrente. Cuando sientes gases cada día, cuando tus digestiones se vuelven pesadas y sientes cierto dolor abdominal.

Son efectos de un hígado que no funciona bien, que no drena, que no desintoxica y que acumula en nuestro organismo toxinas. Corremos el peligro de presentar una ascitis, de ahí que si observas que estos síntomas son recurrentes, debas acudir cuanto antes a tu médico.

2. Cambio de color en orina y heces

¿Tu orina es más blanca de lo normal? ¿Son tus heces también algo pálidas y en ocasiones hasta aparecen pequeños rastros de sangre? Entonces, para salir de dudas lo mejor es ir a nuestro médico. Bien es cierto que este tipo de síntomas puede deberse a otras enfermedades, pero lo normal es que estén asociadas o bien al hígado o bien a los riñones. Comentarte que la orina, al igual que clara también puede aparecer oscura debido a una acumulación de bilirrubina.

3. Ictericia

Es quizá el síntoma más evidente y el que más nos va a poner sobre aviso. El color amarillento en la piel, en los ojos, en las uñas, se debe básicamente a la acumulación ese pigmento de la bilis llamado bilirrubina, en nuestro organismo. Este elemento es básico a la hora de hacer la digestión, pero cuando nuestro hígado no funciona bien, ya no es capaz de eliminarlo luego, de filtrar esos elementos que ya no son útiles tras finalizar la digestión. Se quedan en el organismo y nos ofrecen esa tonalidad amarillenta tan habitual en las enfermedades hepáticas.

4. Sensibilidad en la piel

Sensación de picazón continuo, de molestias, como si algo nos hiciera cosquillas por dentro… una sensación tan molesta como preocupante ¿a qué se debe? básicamente a la acumulación de toxinas en nuestro cuerpo esos elementos que el higado no filtra y que reaccionan en nuestra piel. Pero eso sí, ha de ser algo muy recurrente, de todos modos, ante cualquier duda siempre será tu médico quien te de el diagnóstico, porque algo tan común como los picores pueden deberse también a otros síntomas.

5. Reflujo gástrico

Sensación de llenura en el estómago, de gases que nos oprimen y no nos dejan respirar, y, lo que es peor, el reflujo que asciende al esófago en esos ácidos que nos causan tanto dolor y molestia, son signos asociados a menudo a un hígado intoxicado. Y es que como ya sabemos este órgano está asociado al proceso digestivo, y, si existe algún problema es normal que se traduzca en estos signos tan comunes. Para descartarlo, para saber si está asociado o no a un problema hepático lo mejor es consultar con nuestro médico.

6. Diarrea

Muy común. Lo que comemos no nos suele sentar bien, aparece el ácido gástrico antes nombrado, sentimos presión, malestar y son frecuentes también los episodios de diarrea por un mal funcionamiento del sistema digestivo y depurativo. Hemos de tenerlo en cuenta. Obviamente ante episodios muy frecuentes de diarrea corremos el riesgo de sufrir una deshidratación, así que observa cuántas veces te ocurre.

¿Una vez a la semana, dos? Como otros síntomas aquí expuestos, es posible que esté asociado a otras enfermedades, pero debemos descartar.

7. Fatiga general

Muy característico. Y no solo es cansancio, también es malestar, debilidad y una sensación de letargia continua. Nuestro hígado está trabajando más de lo normal, al estar enfermo e intoxicado se esfuerza más y esta energía por parte de este órgano esencial nos va quitando fuerza a nosotros. Debemos tenerlo en cuenta. Debes ver también si además de este cansancio continuado, tienes también algún otro síntoma de los aquí expuestos: retención de líquidos, malas digestiones, dolor de estómago, picores….

Recuerda que ante cualquier duda, cualquier síntoma, lo mejor es acudir a nuestro médico para que nos haga un chequeo. Tu salud es lo primero.