Hoy, más que antes, escuchamos la importancia de una alimentación saludable. No obstante, encontrar tiempo libre entre el trabajo y la vida personal para reflexionar lo que comemos a diario representa un reto.

Rafael Cornes, nutriólogo de la Federación Panamericana de Lechería (FEPALE) e integrante del equipo ganador del Premio Nacional de Medicina en Uruguay, explica:

La clave de una alimentación saludable es dividir las calorías diarias en porcentajes aproximados de: 60% carbohidratos, 12% proteínas, 25% grasas”.

Balance nutricional

Lo esencial es el balance entre las grasas saturadas, monoinsaturadas, poliinsaturadas, ácidos grasos omega3 y omega6; así como no consumir más del 10% de las calorías en azúcares.

Esto le servirá para encontrar el equilibrio deseado entre cantidad y calidad en la dieta”, explicó el experto.

De esta manera garantizas los nutrientes necesarios para realizar sus funciones y actividades diarias, las cuales van desde cumplir nuestras metas laborales hasta practicar ejercicio u otras acciones recreativas.

7 claves

La Cámara Nacional de Industriales de la Leche (Canilec) en conjunto con la Fepale, te regalan 7 consejos para que logres una alimentación saludable.

1. Revisa el etiquetado

Aprende a identificar los porcentajes de grasa, sodio y azúcares que contienen los productos enlatados. La recomendación de los expertos es no exceder los 200 mg diarios de sodio en productos enlatados.

2. Consume agua

Consume dos a tres litros te ayudará a mantenerte hidratado; si no eres fanático del agua simple puedes alternar con productos como leche o yogurts para alcanzar la meta.

3. Mezcla frutas y verduras

Consume entre cinco y seis porciones de frutas y verduras crudas, cocidas, de temporada y de distintos colores te brindará vitaminas y minerales de manera natural.

4. Agrega lácteos

Recomendaciones mundiales plantean de dos a tres porciones de productos lácteos, los cuales brindan al cuerpo el calcio necesario para prevenir padecimientos como la osteoporosis. Puedes incluirlos en tu dieta en flanes, cremas o hasta un sándwich.

5. Realiza actividad física

Una caminata diaria puede ser suficiente para ejercitarte.

6. Consume proteína animal

Comer pescado de una a dos veces a la semana fortalecerá tu sistema inmunológico. En el caso de la carne procura comer cortes magros, sin grasa visible; y en el caso del pollo evita comer la piel. Un estudio realizado en Kenia por C.G. Neuman demuestra que las dietas suplementadas con carne y leche, mejoran el aprendizaje escolar hasta en un 28%.

7. Evita usar sal

No llevar el salero a la mesa o agregar sal cuando los alimentos ya están cocinados, así como evitar o reducir el consumo de bebidas azucaradas será clave para reducir la posibilidad de padecer alguna enfermedad a largo plazo.

¡Presta atención!

Tu estado anímico y físico es reflejo de los alimentos que consumes, los siguientes síntomas pueden ser una alerta de que no estás logrando una buena alimentación.

1.Aumento o descenso de peso
2.Pérdida masa muscular
3.Falta de concentración
4.Cansancio excesivo
5.Agotamiento
6.Falta de fuerza

La prevención es el mejor tratamiento para el cuidado de tu salud.