El hipotiroidismo, que lo padece el 3% de la población, es la disminución de los niveles de hormonas tiroideas en el plasma sanguíneo y da síntomas como el cansancio y el agotamiento o la debilidad muscular, la sensación de frío, aumento o disminución de peso inexplicable y ansiedad, depresión u otros desequilibrios emocionales.

También hay otros síntomas más sutiles que nos pueden ayudar a detectar esta enfermedad difícil de diagnosticar: tez pálida o amarillenta, retención de líquidos, pérdida de cabello, falta de los extremos exteriores de las cejas y piel muy seca.

Alimentación recomendada

Si padecemos hipotiroidismo nos conviene tomar los siguientes alimentos habitualmente:

Perejil
Huevos
Albaricoques
Plátanos
Almendras
Berros
Pepinos
Guisantes
Manzanas
Higos
Sal yodada o sal marina
Alimentos marinos y algas ricos en yodo como las algas kelp, fucus, espirulina
Pescados
Mariscos

Si nos cuesta tomar las algas, que recomendamos que sean ecológicas para que no contengan sustancias tóxicas, podemos optar por consumirlas en comprimidos. No sólo nos aportan yodo, sino también muchos otros minerales y aminoácidos esenciales muy beneficiosos para nuestro organismo.

Otra opción sería prepararnos nosotros mismos una sal de algas. Deberíamos moler o pasar por el mortero sal marina y las algas que escojamos, además de algunas hierbas aromáticas, mezclarlo todo y guardarlo bien cerrado. La sal actuará como conservante. Podremos usarlo de la misma manera que la sal normal a la hora de cocinar sopas, guisos, etc.

La preparación de tu propia sal de algas te permite tener un mayor control sobre los componentes que deseas añadir, así como garantizar una composición mucho más natural y segura.

Por otro lado, deberemos evitar los siguientes alimentos, ya que bloquean la absorción del yodo:

Col
Col de Bruselas
Coliflor
Brécol
Espinaca
Repollo
Brócoli
Soja
Melocotones
Alubias
Lima
Alimentos procesados
Alimentos refinados
Agua del grifo
Además podemos prepararnos infusiones de poleo y jengibre y cocinar los alimentos con pequeñas cantidades de cayena.