El jitomate es bueno para el corazón. Córtalo por la mitad y descubrirás que el interior recuerda a la estructura del corazón. El tomate es una fuente de licopeno, un antioxidante muy potente que da su color rojo y que posee propiedades contra las enfermedades cardiovasculares.

El apio es bueno para los huesos. Un alimento rígido y alargado, rico en magnesio y hierro, es una fuente excelente de calcio que ayuda a fortalecer nuestros huesos. El apio contiene 23% de sodio. ¡Y los huesos tienen exactamente la misma proporción!

La nuez es buena para el cerebro. Este fruto seco es idéntico a nuestro órgano y, sin lugar a dudas, lo debe ser por una buena razón. La nuez, que contiene una gran cantidad de ácidos grasos, minerales y oligoelementos, como el zinc, tiene la capacidad de estimular la memoria y asegurar el buen funcionamiento del cerebro.

El aguacate es bueno para el útero. El aguacate tiene esa forma femenina y redondeada que nos recuerda a los ovarios. Además de ser un fruto muy nutritivo y con ácidos grasos buenos, las vitaminas que contiene (B5, B6, K, etc.) permiten proteger el cuello del útero y prevenir ciertas enfermedades y anomalías en el feto. Como nota curiosa, la maduración del aguacate dura… ¡9 meses!

La zanahoria es buena para los ojos. Si la cortamos en rodajas, la zanahoria tiene muchos puntos en común con el iris de nuestros ojos: encontramos el mismo tipo de pigmentos, una pupila y círculos concéntricos. La zanahoria es rica en betacaroteno, un antioxidante famoso por sus virtudes para la vista, sobre todo para la vista nocturna

Las naranjas son buenas para los pechos; en general los cítricos. Además de parecerse, tienen efectos beneficiosos para las glándulas mamarias. Ricos en antioxidantes, disminuyen la aparición de células cancerígenas en las mamas.

El racimo de plátano parecen los dedos de una mano. Los bananos son la fruta que mas potasio tiene, y se sabe que el potasio es necesario para tener buenas articulaciones, evitando que se solidifiquen y degeneren,  y qué parte de nuestro cuerpo tiene la mayor cantidad de articulaciones? ¡La mano!

Los champiñones son buenos para los oídos. Rico en vitamina D, el champiñón tiene la capacidad de mejorar la audición.

Los frijoles son fuentes leves de proteínas, que calman nuestras suprarrenales sobre  estimuladas por el estrés de la vida moderna, y ayudan a regular la presión arterial, por ser óptimas fuentes de magnesio y potasio.

El higo es bueno para los espermatozoides. ¿Alguna vez te has fijado en las minúsculas semillas de un higo? Comer higos combate la esterilidad masculina y favorece la movilidad y producción de espermatozoides. Además, contienen Vitamina B6, la cual es la responsable de la serotonina, la hormona de la felicidad.

Las fresas o frutillas, en su corte transversal, se asemejan a los dientes. Y las fresas no sólo los blanquean al frotarlas contra ellos, sino que mantienen una dentadura fuerte y sana, que junto con el rojo, indica su parte homóloga para la salud de las encías.

De forma similar a los ovarios, las aceitunas tienen efectos muy beneficiosos sobre las funciones de las glándulas linfáticas. El aceite de oliva es bueno para nuestro cuerpo, ya que es rico en ácidos grasos saturados, poliinsaturados y monoinsaturados.

Las uvas son buenas para los pulmones. Los racimos de uvas nos hacen pensar en los bronquios y bronquiolos de nuestro aparato respiratorio. Además de sus propiedades medicinales contra la diabetes, la fatiga y el estreñimiento, la uva reduce los riesgos de cáncer de pulmón

 

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