El crup es una infección respiratoria que produce estrechamiento de la laringe o de la tráquea a causa de la inflamación. La laringe presenta espasmos y el paciente experimenta dificultad para respirar, tos seca, ronquera, opresión pulmonar y sensación de asfixia. La secreción mucosa también puede aumentar, lo que obstruye aun más las vías respiratorias. El crup se presenta con más frecuencia en los niños pequeños, cuyas vías respiratorias son mucho más estrechas que la de los adultos.

Una de las características del crup es un resuello ronco y sibilante que se produce cuando la persona inspira aire a través de las vías respiratorias obstruidas y sobre las cuerdas vocales inflamadas. Otra característica son los accesos de tos. Por lo general, el crup va precedido de resfriado, bronquitis o ataque alérgico, pero también se puede presentar al inhalar un cuerpo extraño. Los ataques de crup usualmente se presentan por la noche.

Cuando los niños tienen crup deben tomar abundantes líquidos para ablandar la mucosidad. Buenas opciones son agua destilada al vapor, tés de hierbas y sopas hechas en casa. Añada vitamina C, Zinc, vitamina A y vitamina E.

Cuando un niño tiene crup y esta respirando con mucha dificultad, se debe llevar a la sala de urgencias del hospital más cercano para que lo traten y le tomen radiografías de la laringe. Es probable que necesite oxigeno y antibióticos.