La Organización Mundial de la Salud explica que el consumo excesivo azúcar es responsable del sobrepeso, por lo que sugiere consumir hasta 25 gramos al día, lo que equivale alrededor de seis cucharadas.

La recomendación apunta a cuidar la cantidad de azúcar añadida y refinada que se consume a través de alimentos industrializados y procesados como refrescos, jugos y concentrados de fruta, así como en la miel y en jarabes.

Es importante subrayar que el abuso es lo que puede determinar aumento en el peso corporal.

¿Por qué el azúcar es responsable del sobrepeso?

De acuerdo con el Instituto de Estudios del Azúcar y la Remolacha (IEDAR), estos son algunos argumentos que afirman que el consumo del dulce impide mantener el peso ideal.

1. Estimula el apetito. La fructosa, azúcar utilizada en los alimentos industrializados, estimula las áreas del cerebro vinculadas con el hambre, afirman investigadores de Yale University School of Medicine de Estados Unidos.

La fructosa disminuye la circulación de hormonas de la saciedad, lo cual posiblemente aumenta el comportamiento de alimentación y aumenta la ingesta de alimentos calóricos”, concluye el estudio.

2. Es adictiva. Predispone a un consumo excesivo. Cuando se toman bebidas azucarada el cerebro libera dopamina que produce una sensación de placer que busca repetirse, favoreciendo la adicción.

La dopamina y opioide participan en la motivación y recompensa, sistemas que controlan el deseo y el placer”, concluye una investigación de la Universidad de Princeton en Estados Unidos.

3. Se convierte en grasa. Cuando se come un alimento con azúcar refinada, el organismo lo transforma en energía que si no se gasta adecuadamente y a tiempo, se transforma en grasa corporal y el queda almacenada.

Estas tres condiciones predisponen al sobrepeso porque al estimular el apetito y crear adicción se genera la necesidad de seguir comiendo; si además se lleva una vida con poca actividad física esa grasa almacenada se acumula al no encontrar la manera de eliminar las calorías extra. ¿Tú cómo controlas tu gusto por el azúcar?