Este es un alimento clásico y casi “preferido” para el desayuno o la merienda. Untado en pan tostado o en hotcakes se convierte en la delicia para chicos y grandes, pero te has preguntado ¿qué tan saludable es la mermelada que consumes con “regularidad”?.
La nutrióloga Xaviera Cabada, coordinadora de la Campaña de Salud Alimentaria de El Poder del Consumidor, señala la importancia de conocer los ingredientes de los productos que consumes para una mejor nutrición.
¿Qué ingredientes se deben revisar?
Xaviera Cabada numera los elementos que debes considerar al elegir las mermeladas.
Revisa que esté elaborada de azúcar y no fructosa o jarabes y que el primer ingrediente sea la fruta.
Evita productos con “azúcares” porque tienen jarabe de maíz de alta fructosa, fructosa u otro tipo de endulzantes. Si dice “azúcar” esta solo es de mesa.
Escoge la que esté libre de colorantes artificiales como el rojo allura o amarillo 5 y/o 6. Este último es un derivado del petróleo, asociado a cambios de conducta como hiperactividad y déficit de atención en niños y niñas.
Desecha mermeladas “sin azúcar”, porque algunas usan sustitutos como la polimaltodextrina, maltodextrinas o gomas para darles mayor espesor.
Prefiere mermeladas que no contengan edulcorantes como la sucralosa. Estos productos no son recomendables para la alimentación de los niños.
¡Cuidado con los azúcares!
Debido a que la “buena” salud depende, en gran medida, de la elección adecuada de los alimentos, es importante tomar en cuenta la cantidad de azúcares o endulzantes, como las que hay en las mermeladas.
Los productos con “azucares” (jarabes de fructosa o alta fructosa) afectan tu salud y nutrición. Su consumo se asocian con padecimientos como la obesidad y la diabetes, señala un estudio.
Por su parte, el profesor Andrew Prentice, de la Unidad de Nutrición y Salud Pública de la Escuela de Londres, dice que si un niño come con frecuencia un sándwich de mermelada, y no equilibra su dieta con frutas y verduras, tiene mayor riesgo de padecer obesidad en la edad adulta.
Al respecto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que para el próximo año, 1,500 millones de adultos en el mundo tendrán sobrepeso.
Ante estas cifras alarmantes, la OMS hace un llamado para cuidar la cantidad de calorías consumidas y las gastadas. Esto se puede controlar con actividad física y una dieta baja en grasas harinas y azucares.
Por ello, si te gusta la mermelada, una opción para no privarte de este alimento es preparar un puré de fresas (o la fruta de tu elección) con una pizca de azúcar moscabada, comparte Xaviera Cabada.
Las mejores decisiones de nutrición están en tus manos. Con estos elementos, podrías considerar en tu próxima compra qué tan saludable es la mermelada que consumes. ¡Cuida tu salud!.
Deja una respuesta