Existe la idea de que las bebidas de dieta contienen menos calorías y ayudan a mantener la figura ideal, sin embargo, hay investigaciones que demuestran que el consumo de refrescos light daña la salud.

Beber habitualmente refrescos de dieta, incluso uno por día, se puede asociar con mayor probabilidad de desarrollar enfermedades del corazón, derrame cerebral, diabetes, síndrome metabólico e hipertensión arterial, además contribuyen al aumento de peso”, afirma Susan E. Swithers en un estudio realizado para Purdue University en Estados Unidos.

Realmente son una opción saludable

A pesar de que cobra sentido el hecho de que los refrescos light son “inofensivos” y no causan problemas de salud, la investigación de Purdue University asocia el consumo de refrescos de dieta con los siguientes padecimientos.

1. Enfermedades del corazón. Beber uno o más refrescos light al día podría elevar el riesgo de sufrir un infarto o padecer algún problema cardiovascular entre las mujeres. Antonio Gil, especialista de la Sociedad Española de Neurología, explica que las sodas contienen sodio y fructosa que cuando se consume en exceso eleva el nivel de la prensión arterial.

2. Diabetes. El consumo regular (1 o 2 latas) de refrescos de dieta puede aumentar hasta 60% el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Una de las razones es que el aspartame, principal edulcorante artificial, provoca un aumento de azúcar en la sangre y picos en los niveles de insulina, lo cual podría generar una mayor resistencia, favoreciendo la aparición de esta enfermedad explica un estudio publicado en American Journal of Clinical Nutrition.

3. Síndrome metabólico. La Purdue University asocia el consumo diario de refresco de dieta con 36% de probabilidades de desarrollar síndrome metabólico si se compara con una dieta libre de esta bebida. Esta afección concentra los factores de riesgo que elevan las probabilidades de padecer una enfermedad cardiovascular o diabetes tipo 2, entre glucosa en la sangre, hipertensión arterial, exceso de grasa en la cintura.

4. Aumento de peso. Como estas bebidas no son lo suficientemente saciantes, provoca que se consuman más calorías a través de alimentos sólidos, se explica en el artículo de American Journal of Clinical Nutrition.

Los edulcorantes artificiales o “azúcar falsa” de estas bebidas engañan al cuerpo haciendo que piense que está consumiendo algo dulce. El organismo no metaboliza estos endulzantes igual que la glucosa, haciendo que se acumule y se transforme en grasas, condición que eleva el riesgo de sobrepeso”.

5. Desgaste del esmalte de dientes. Mirtala Güitrón Reyes, especialista en periodoncia, implantología y odontogeriatría, explica que la mayoría de refrescos de cola, sean light o no, contienen ácido cítrico u ortofosfórico. Estos desgastan el esmalte de los dientes y favorecen la acumulación de bacterias con lo que se llega a formar caries..

Hay polémica si el excesivo consumo de bebidas light endulzadas con ciclamato de sodio, capaz de endulzar hasta 600 veces más que el azúcar de caña, podrían generar cáncer. Este endulzante artificial está aprobado por Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos.

Sin embargo, en 1970 se asoció el consumo del ciclamato con cáncer de vejiga en ratas y se prohibió su consumo en varios países.

El National Cancer Institute explica que después de unos estudios concluyó que el ciclamato no es cancerígeno”.

En general, los refrescos light no son recomendables si se quiere llevar una alimentación saludable. ¿Cuántos vasos acostumbras beber todos los días?.