El exceso en el consumo de este alimento puede generar no sólo un sobrepeso que dañe la autoestima, sino también la capacidad mental.

De acuerdo con una investigación realizada por la Universidad de California en Estados Unidos, una dieta rica en azúcar dificulta el aprendizaje y la memoria.

Sin embargo, existen sustitutos del azúcar que evitan los riesgos de este dulce placer sin arriesgar el sabor de los alimentos. ¡Todo depende de que te animes!

¡Placer difícil de renunciar!

Entre el café, el té, el yogurt con frutas, el jugo o el chicle, se puede acumular una gran cantidad de azúcar al día sin percatarse de ello. Cada una de estos insumos puede calcularse en una ingesta de 300 a 600 calorías diarias, lo que es una gran cantidad si se considera que el azúcar no es un nutriente, sino un aditivo que causa saciedad.

Por ello, te proporcionamos 9 sustitutos para el azúcar:

1. Cereales comerciales por granola. Por más tentadores que parezcan, los cereales con chocolate y sabores dulces hay que evitarlos. Lo mejor es preparar una granola casera con avena, semillas y frutas secas, y añadir un poco de miel si es necesario.

2. Refrescos por jugos de fruta natural. No hace falta mencionar la cantidad de azúcar que tienen los refrescos y algunos jugos empacados. Reemplázalos por jugo natural exprimido: en la naturaleza hay una extensa variedad de frutas y pueden hacerse bebidas deliciosas.

3. Mermeladas por frutas frescas.

4. Sustituir azúcar refinada por sobres de endulzantes naturales. Sabemos que es difícil eliminar el azúcar en nuestras bebidas como en el té o el agua de sabor. Actualmente existen varias opciones de sustitutos en bajas calorías.

5. Chocolate con leche por chocolate amargo. Créase o no, no es necesario eliminar por completo el chocolate de tu dieta. Lo que sí es fundamental es que reemplaces el chocolate con leche por chocolate amargo, que es mucho más saludable y liviano.

6. Golosinas por snacks saludables. En un momento de ansiedad o de aburrimiento, es común llevarse un dulce o y chicle a la boca para entretenerse. En lugar de comer esas pequeñas bombas de azúcar, puedes comer pepino o zanahoria rallada que aportan una gran fuente de vitaminas.

7. Frutas en almíbar por frutas naturales. A la hora del postre trata de no usar latas de fruta en almíbar como los duraznos, piña o cerezas. Trata de sustituirlos por fruta natural y fresca, o bien por fruta deshidratada que contienen menos azúcares y son ricas en fibra, vitaminas y minerales.

8. Light no siempre es mejor. El hecho de que un alimento sea light no significa que no tenga azúcar. Es recomendable siempre revisar las etiquetas o los cuadros de información alimenticia para conocer la cantidad de azúcar.

9. No almacenes postres en la cocina o platillos que lleven azúcar. Tener en la cocina postres o platillos que lleven azúcar contribuye a caer en la tentación de consumirlos. Si convives en casa con otra persona, trata de ponerlos alejados de tu vista de forma que no tengas oportunidad de pensar ellos.

Todo el proceso de ingerir menos azúcar debe ser gradual, ya que hacerlo de manera repentina podría ocasionar malestar al organismo que ya se encuentra acostumbrado a su consumo.

Lo ideal es irse acostumbrando poco a poco a menores dosis de azúcar, hasta llegar al nivel deseado. Recuerda tu salud está en tus manos. ¡Cuídate!