Las vacaciones deberían ser una oportunidad para re-energizar y relajarse – no una excusa para tomar un descanso de la salud. Durante los viajes, creemos que relajar la voluntad y ceder un poquito ante las tentaciones de comida y bebidas que implica salir fuera de nuestra rutina, significa subir de peso y echar por la borda todo el esfuerzo realizado hasta entonces. Estar de viaje no significa perder  el avance logrado; aquí te damos 8 tips para que puedas mantener tus logros mientras te diviertes y disfrutas de un merecido descanso:

1.     Toma mucha agua: Es básico mantener tu cuerpo hidratado, ya que eso ayudará a que vayas con más frecuencia al baño y elimines las toxinas que vayas consumiendo en el camino. También opta por bebidas sin endulzar, como tés sin cafeína, no frutales – que los encuentras fácilmente en muchos establecimientos – o lleva tu buena dotación para que no haya pretexto de que consumas productos que saboteen tu esfuerzo.

2.     Camina y sube escaleras: Sabemos perfecto que, al estar de vacaciones, el gimnasio queda en “pausa”; aprovecha a caminar para conocer el lugar que estés visitando, y en el hotel en vez de usar el elevador, usa las escaleras. Si hay alberca un poco de natación te vendrá de maravilla, además de que te pondrá de muy buen humor. Y qué decir de una caminata por la playa al atardecer, muy relajante.

Muchos hoteles tienen gimnasio o actividades físicas; aprovéchalas. Como ves, no hay pretexto para que dejes de moverte.

3.     Haz 5-6 comidas al día: divide las tres comidas en 5-6 tiempos, espaciados por tres horas, para que evites sentir hambre y comas lo primero que encuentres. Procura elegir un desayuno ligero – en los hoteles hay buffet y siempre hay opciones saludables (y si no las ves, pregunta al mesero). A mediodía, procura consumir un puñito de almendras. En la comida elige ensaladas frescas, pescado a la plancha con verduras al vapor o crudas, a media tarde otra colación como una barra raw, y cena ligero – evita llenarte.

4.     Planea tus alimentos: si vas a tener una comida o cena especial, te sugerimos evitar la colación anterior.

5.     Limita tu consumo de alcohol: Si bien el alcohol es ácido, si es una ocasión especial, toma una sola copa de vino (no bebidas compuestas ni endulzadas).

6.     Mide tus porciones: En muchos lugares, los platillos que sirven son muy vastos. No tienes que terminarte todo el plato, comparte con alguien y come despacio.

7.     Mastica cada bocado: para que des tiempo a que la señal de saciedad llegue al cerebro y así consumas menos alimentos de los que tu cuerpo necesita para
sentirse satisfecho.

8.     Prepara tus snacks: hay muchas opciones de snacks que puedes llevar a tus viajes o que puedes comprar fácilmente: barras raw, almendras naturales, semillas; puedes comprar en mercados locales fruta fresca (manzanas, naranjas, peras); también podrás encontrar locales que venden productos artesanales y orgánicos que puedes disfrutar sin poner en riesgo tu régimen.