Entre los diversos insectos que pican esta el mosquito, la hormiga, la pulga, el zancudo (o el jején) y la garrapata. Las arañas que no son insectos en el sentido estricto de la palabra, también pican. La mayoría de las picaduras de insecto son molestas y producen escozor y enrojecimiento locales, pero son relativamente inocuas. Sin embargo, hay algunos insectos cuya picadura pueden revestir gravedad. La picadura de garrapata puede propagar enfermedades como babesiais,  enfermedad de Lyme o fiebre manchada de las montañas Rocosas. En algunos lugares (principalmente en los países en vía de desarrollo), la picadura de mosquito puede trasmitir malaria, fiebre amarilla y virus productores de encefalitis (inflamación del cerebro).

Para las picaduras de hormiga, mosquitos y nigua, lávese muy bien el área afectada con agua y jabón. Para las picaduras de nigua, utilice un cepillo y refriéguese. Para las picaduras de garrapata, retire el insecto lo más rápido que pueda. Cuanto más pronto lo retire, tanto menos riesgo corre de contraer cualquiera de las enfermedades que puede trasmitir.

Para evitar que lo piquen los mosquitos, antes de salir al aire libre consuma arroz integral, levadura de cerveza, germen de trigo o pescado. Estos alimentos  son ricos en vitamina B1 (Tiamina). A los mosquitos los atraen el dióxido de carbono, el estrógeno, la humedad, el sudor y el calor. En cambio, los repelen las vitaminas B, especialmente la tiamina, que son excretadas por la piel.  Añada buenas dosis de vitamina C y Bioflavonoides.

Evite las bebidas alcohólicas. El alcohol hace que la piel  se sonroje y que los vasos sanguíneos se dilaten, lo que atrae a los mosquitos y a los tábanos.

 

Phyllis A. Balch. (2000). Piquete de insecto. En Recetas nutritivas que curan(440). New York: Avery.